SIFILIS CARDIOVASCULAR: aparece en forma de aortitis sifilítica, constituye más del 80% de los
casos. Conduce a la dilatación de la raíz y cayado aórtico, lo que causa insuficiencia valvular aortica y
aneurismas (dilatación) de la aorta proximal (al corazón), este aneurisma genera alteración en la válvula
aórtica, llevando a una insuficiencia con un flujo retrógrado de sangre, es decir, cuando se expulsa la
sangre, va a haber una cantidad que vuelve porque la válvula es insuficiente. Esto aumenta las
capacidades cardíacas, el volumen residual y lleva a complicaciones cardiacas retrogradas, debido a
que el corazón funciona con una válvula insuficiente.
La endoarteritis produce una oclusión de vasos que irrigan a la aorta proximal, esto conlleva a la
formación de tejido cicatrizal en la media de la pared de la aorta. Se produce una pérdida de elasticidad,
dando como resultado la dilatación.
Se produce un estrechamiento de los orificios de origen de las coronarias, dando lugar a alteraciones
isquémicas en el miocardio.
NEUROSIFILIS: puede ser sintomática o asintomática. La sintomática se manifiesta de varias formas,
como:
1. Enfermedad meningovascular crónica: meningitis crónica (inflamación de las meninges, tejido
que cubre al SNC) que afecta la base del cerebro y las convexidades, también a las meninges
medulares.
2. Tabes dorsal: se da como consecuencia del daño que sufren los nervios sensitivos de las raíces
dorsales, deteriorando sentido postural de las articulaciones y provocando ataxia (deterioro en
el equilibrio o la coordinación). Perdida de sensación dolora, se generan daños en la piel.
Dolores fulgurantes característicos (son dolores de tipo eléctricos, característicos cuando hay
afectación nerviosa) y ausencia de reflejo tendinoso profundo.
3. Enfermedad parenquimatosa cerebral generalizada llamada paresia general o neurosifilis
paretica: pérdida progresiva de las funciones mentales asociada a alteraciones del estado de
ánimo, que culmina en una demencia grave.
La asintomática se detecta cuando el LCR de un paciente muestra anomalías como pleocitosis (número
elevado de células inflamatorias), niveles elevados de proteínas o disminución de glucosa. Los
anticuerpos estimulados por las espiroquetas también pueden detectarse en el LCR. Los antibióticos se
administran durante más tiempo si las espiroquetas se han diseminado al SNC.
SÍFILIS BENIGNA: se caracteriza por la formación de
gomas en varias localizaciones. Las gomas son
lesiones nodulares relacionadas con el desarrollo de hipersensibilidad retardada a las bacterias.
Aparecen frecuentemente en el hueso, la piel y las membranas mucosas de las vías respiratorias altas y
la boca. Histológicamente son granulomas: material necrótico central, márgenes compuestos de
fibroblastos y macrófagos con corona de leucocitos mononucleares, principalmente células plasmáticas.
Al afectar el esqueleto: causa dolor local, sensibilidad a la palpación, tumefacción (hinchazón) y en
ocasiones, fracturas patológicas.