
Prejuicio sutil y manifiesto
Sutil es su expresión moderna (fría, distante e indirecta) y Manifiesto la forma tradicional del prejuicio
(vehemente, cercana y directa)
el estudio del prejuicio racial toma un giro hacia nuevas conceptualizaciones con las nociones de racismo
simbólico y moderno. En cuanto al primero, se compone de cuatro creencias básicas que reflejan la
confluencia del conservadurismo político, los valores individualistas y los afectos raciales adquiridos en la
temprana infancia. Estas cuatro creencias son: a) “La discriminación hacia la raza negra, es una cosa del
pasado”; b) “La falla en el progreso de la gente de color, es debido a que no se esfuerzan lo suficiente”; c)
“Las personas de raza negra demandan demasiado”; d) “Estos individuos tienen más de lo que se
merecen”. El segundo, deriva el simbólico pero el racismo moderno sostiene que diferentes formas de
afecto negativo como miedo o desagrado son adquiridas durante el proceso de socialización o por
aprendizaje modelado y persisten hasta la vida adulta.
Posteriormente a estos desarrollos surgieron otras teorías raciales; una de las mas divulgadas fue el
racismo aversivo.
Racismo aversivo Forma de prejuicio sutil y encubierto que ocurre en individuos que, en apariencia,
rechazan las actitudes y creencias racistas, pero aún mantienen prejuicios y discriminación de manera
encubierta. Surge de un experimento en EEUU, donde mediante llamadas telefónicas de blancos y
afroamericanos pidiendo ayuda, se observa que los liberales colgaban mayormente el teléfono a los
afroamericanos, y los conservadores les colgaban a ambos por igual.
El racista aversivo no siente odio u hostilidad abierta hacia los miembros del otro grupo. Los sentimientos
son más bien de incomodidad, inquietud, disgusto y a veces miedo. El racista aversivo sabe que el
prejuicio es malo, pero él no se considera prejuicioso.
** el prejuicio manifiesto coincide con el racismo clásico, el prejuicio sutil ocupa una posición intermedia
entre el racismo moderno y el aversivo**
Emociones prototípicas que favorecen la emergencia de diferentes formas del prejuicio
1. La piedad (Prejuicio Paternalista): grupos percibidos con un bajo estatus, considerados
incompetentes, pero a su vez vistos con un alto nivel de calidez, dan lugar al prejuicio
paternalista. Ej.: amas de casa, discapacitados, personas de edad avanzada. Estos grupos
suelen generar compasión y empatía. es considerada una respuesta emocional que da lugar al
prejuicio paternalista debido a que la compasión por parte de quien percibe se posiciona en un
papel dominante, superior a la persona percibida.
2. La envidia (Prejuicio Envidioso): sensación de sentirse en desventaja frente a otras personas que
son valoradas como significativamente más competentes. Los sentimientos negativos de
inferioridad que provoca la envidia conllevan la mayoría de las veces a considerar a los altos
niveles de competencia del exogrupo como ilegítimos. La envidia pareciera ser la reacción más
prototípica hacia grupos percibidos como superiores.
3. El desprecio (Prejuicio Despreciativo): percibir a grupos como incompetentes y fríos, la cual dará
cuenta del prejuicio de tipo despreciativo. Estos grupos suelen provocar una antipatía tal que
provoca ira, desprecio, asco y resentimiento; y se las responsabiliza por sus resultados
negativos, como si se afirmara que ellos tienen la culpa de la situación en la que se encuentran.
Son considerados una carga para el resto de la sociedad. Ej.: desempleo y pobreza son
considerados como consecuencias de la voluntad por parte de los individuos.
4. Admiración: Ciertos grupos sociales son percibidos con un alto estatus, pero sin embargo no son
considerados como competencia para el endogrupo, ya sea porque son altamente dominantes o
debido a que son grupos de referencia percibidos como aliados. Como tienen un alto estatus,
provocan admiración y orgullo. Las personas suelen presentar actitudes positivas hacia los éxitos
de otras personas, siempre y cuando ese éxito no sea desfavorable para el autoconcepto, ya que
ahí afectaría la autoestima y podría ser recategorizado como envidia.