–
Contar el número de respiraciones (1 inspiración + 1 espiración = 1 respiración),
tomadas en 30 segun dos, multiplicando el resultado por dos (2) obtendrá las
respiraciones por minuto.
–
Los valores normales de la respiración en adultos oscila entre 12 a 20
respiraciones por minuto, teniendo la mayoría de las personas de 12 a 15 como
promedio normal. Los ancianos tienden a respirar más lento que los adultos
jóvenes, los lactantes pueden tener un rango de 30 a 50 respiraciones por
minuto. Para los adultos, una frecuencia que sobrepasa las 28 respiraciones por
minuto es grave. Observe el ritmo, la profundidad, el sonido y la facilidad con que
respira, mientras cuenta las respiraciones.
• Presión Arterial:Es la presión ejercida por la sangre sobre las paredes de las
arterias. La presión arterial es un índice de diagnóstico importante, en especial de
la función circulatoria. Debido a que el corazón impulsa hacia las grandes arterias
un volúmen de sangre mayor que el que las pequeñas arteriolas y capilares pueden
absorber, la presión retrógrada resultante se ejerce contra las arterias. Cualquier
trastorno que dilate o contraiga los vasos sanguíneos, o afecte a su elasticidad, o
cualquier enfermedad cardiaca que interfiera con la función de bombeo del corazón,
afecta a la presión sanguínea. En las personas sanas la tensión arterial normal se
suele mantener dentro de un margen de terminado. El aumento se produce cuando
las arterias pierden su elasticidad que, en las personas jóvenes, absorbe el impulso
de las contracciones cardiacas. La presión arterial varía entre las personas y, en un
mismo individuo, en momentos diferentes. Suele ser más elevada en los hombres
que en las mujeres y los niños; es menor durante el sueño y es influida por una gran
variedad de factores.
Para medir la presión arterial se tienen en cuenta dos valores: el punto alto o
máximo, en el que el corazón se contrae para vaciar su sangre en la circulación,
llamado sístole; y el punto bajo o mínimo, en el que el corazón se relaja para llenarse
con la sangre que regresa de la circulación, llamado diástole. La presión se mide
en milímetros de mercurio (mmHg) con la ayuda de un instrumento denominado
esfigmomanómetro o tensiómetro.