
PRESION ARTERIAL.- ANÁTOMOFISIOLOGIA.- Dra Mabel Gerez
Abril 2015
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Con una estimulación máxima parasimpática, la frecuencia puede disminuir 20 o 30 1pm,
o hasta incluso detenerse momentáneamente.
Regulación Química de la Frecuencia Cardiaca
Ciertas sustancias químicas influyen tanto la fisiología básica del músculo cardiaco como la
frecuencia cardiaca. Por ejemplo, la hipoxia (bajos niveles de oxigeno), la acidosis (pH
disminuido) y la alcalosis (pH elevado) deprimen la actividad cardiaca.
Varias hormonas y cationes tienen importantes efectos cardiacos:
1. Hormonas. La adrenalina y la noradrenalina (de la medula suprarrenal) aumentan la
contractilidad cardiaca. Estas hormonas estimulan a las fibras musculares cardiacas
de manera semejante a la de la noradrenalina liberada por las terminaciones
nerviosas simpáticas: aumentan la frecuencia y el inotropismo (contractilidad). El
ejercicio, el estrés y la excitación causan liberación de dichas hormonas por la
medula suprarrenal. Las hormonas tiroides también aumentan la contractilidad y la
frecuencia cardiacas. Un signo del hipertiroidismo (aumento excesivo de las
hormonas tiroideas) es la taquicardia (taqui-, de takhys, rápido), el aumento de la
frecuencia cardiaca de reposo.
2. Cationes. Dado que las diferencias en la concentración de los diferentes cationes
tanto intra como extracelulares son cruciales para la producción de los potenciales
de acción en los nervios y fibras musculares, no es sorprendente que los
desequilibrios iónicos puedan comprometer rápidamente la acción de la bomba
miocárdica. En particular los cambios en las concentraciones de tres cationes- Na
+
,
K
+
y Ca
2+
tiene un gran efecto en la función cardiaca. El aumento de la
concentración sanguínea de Na
+
y K
+
disminuye la frecuencia cardiaca y la
contractilidad.
El exceso de Na
+
bloquea la entrada de Ca
+
la célula durante el potencial de
acción, disminuyendo la fuerza de contracción, mientras que el exceso de K
+
bloquea la generación de potenciales de acción. Un amento moderado de Ca
+
intersticial (e intracelular) aumenta la frecuencia cardiaca y la contractilidad.
Otros Factores que Regulan la Frecuencia Cardiaca
La edad, el sexo, el nivel de entrenamiento y la temperatura corporal también influyen
sobre la frecuencia cardiaca de reposo. Un bebe recién nacido tiene una frecuencias en
reposo por encima de 120 lpm; la frecuencia va disminuyendo con los años. Las
mujeres adultas suelen tener frecuencia en reposo mayores que los hombres; el
ejercicio regular tiende a disminuir la frecuencia basada en ambos sexos por una
persona entrenada puede tener bradicardia de reposo, frecuencias cardiacas menor de
50 lpm.
El entrenamiento de resistencias es beneficioso debido a que aumente la eficiencia
energética del corazón. Un aumento de temperatura corporal, como el que se produce
durante la fiebre o el ejercicio intenso, produce una descarga mas rápida del nódulo SA
y un aumento de la frecuencia cardiaca. El descenso de la temperatura corporal
disminuye la frecuencia y la contractilidad.