
CONOCIMIENTO
Wundt, Piaget, Vygotsky, Bruner, Gardner, Gestalt
CARACTERÍSTICAS GENERALES
Conocimiento: CONSTRUCCIÓN O PROCESAMIENTO. Será esa intermediación de
una determinada información verbal, sensible o psíquica que tendremos en
función de ESTRUCTURAS COGNITIVAS/MENTALES. Se origina desde la ACCIÓN,
entendida como el proceso dinámico discontinuo entre la realidad y la cosa
(percibimos y conocemos el mundo mediante ella)
NUCLEÓ EPISTÉMICO DEL CONOCIMIENTO;
Representación: Mediación posible y necesaria para llegar al conocimiento
entre el sujeto y el objeto. La RE-PRESENTA-ACCIÓN.
Substrato de la neoconstrucción lógico-simbólica, automática y retroactiva,
de causalidad empírico sensual, apriorística o combinada.
Conciencia (entendida como una especie de tercer ojo): Asimila las
representaciones. Inmediata, INEQUÍVOCA, ideal. Juega un papel primario dentro
del plano psicológico de la mente. Convalida todo en nosotros.
Mente: Ordenador/procesador de la información a modo de archivos guardados
(al estilo software/hardware) como una computadora.
HOMBRE DEL CONOCIMIENTO:
“El hombre light, no es profundo, no lee, no quiere problemas muy complicados ni
tener que pensar cómo es la cosa. Lo quiere todo ya. El inteligente no es el culto,
es el informado de todo un poco, el rápido, el eficaz. No le interesa el pasado o la
historia, sólo su presente y su futuro.”
EL HOMBRE-MÁQUINA, operador cognoscitivo, soporte de sí mismo en el
procesamiento de la información autoprocesada. Individuo inteligente y
ACTIVO en la adquisición de conocimiento, aborrecido del innecesario plus
humano, sin subjetividad alguna pero feliz, siempre feliz en una MERITOCRACIA
donde es “libre”.
*El objeto teórico no será el sujeto, sino su inteligencia, entendida como poder.
En desarrollo permanente, siempre hacia adelante por “el bien de la humanidad
y la estabilidad social” Debe grabársele la idea de progreso en la cabeza.
*El gobierno del conocimiento es la Democracia, ya que pone a los hombres en
un supuesto libre albedrío cuando en realidad se encuentran en un augurio
totalitario que aspira siempre a un amo que ponga orden, que les diga qué hay
que hacer.