
El el aprendizaje por emulación y la ritualización ontogenética requieren, cada cual, habilidades
de cognición y aprendizajes sociales, pero no requieren aptitud para el aprendizaje imitativo.
Ambos son las clases de aprendizaje social que uno esperaría hallar en organismos muy
inteligentes y capaces de aprender con rapidez
El otro proceso importante en la transmisión cultural es la enseñanza. La enseñanza tiene lugar
desde arriba hacia abajo, cuando individuos cultos o hábiles procuran transmitir conocimientos
o habilidades a otros.
Los monos culturizados:
Los estudios demuestran que los monos criados por seres humanos en un ambiente cultural
similar al de estos, pueden desarrollar algunas habilidades similares a las humanas. Una
hipótesis plausible es que, en los ambientes culturales similares a los humanos, estos monos
reciben una especie de socialización de la atención. Es decir, en sus hábitats naturales los monos
no tienen a nadie que les indique. En un ambiente cultural similar al de los humanos, en cambio,
interactúan constantemente con estos, que les muestran o señalan cosas, les alimentan la
imitación y les enseñan habilidades especiales, todo lo cual implica un triángulo referencial
entre el humano, el mono y una tercera entidad. Pero es importante reconocer que los monos
que son criados en un ambiente cultural humano no por eso se convierten en seres humanos.
La conclusión es que la capacidad de aprendizaje desarrollada por los chimpancés en la
naturaleza es suficiente para crear y mantener las actividades culturales típicas de la especie,
pero no para crear y mantener actividades culturales similares a las humanas, que incluyan el
efecto trinquete y la evolución cultural acumulativa.
La evolución cultural humana:
En conclusión, si bien los chimpancés crean y mantienen lo que, en una definición amplia,
podría llamarse tradiciones culturales, probablemente los procesos de cognición social y
aprendizaje social en que se basan esas tradiciones sean diferentes de aquellos en que se basan
las tradiciones culturales de los seres humanos. En algunos casos, esta diferencia de procesos no
da lugar a diferencias concretas en los resultados, en cuanto a organización social, trasmisión de
información o cognición, pero en otros casos aparece una diferencia decisiva, que se manifiesta
en los procesos de evolución cultural, es decir en los procesos a través de los cuales una
tradición cultural acumula modificaciones con el paso del tiempo
La evolución cultural acumulativa y el efecto trinquete
Algunas tradiciones culturales acumulan las modificaciones introducidas por diferentes
individuos a lo largo del tiempo, así se vuelven más complejas y abarcan una gama más amplia
de funciones adaptativas; esto es evolucion cultural acumulativa o efecto trinquete.
Es de presumir que también algunas convenciones y rituales culturales se volvieron con el
tiempo más complejos, al ser modificados para satisfacer nuevas necesidades comunicativas y
sociales. Este proceso puede ser característico de algunas culturas humanas más que de otras, o
de algunos tipos de actividades más que de otros, pero, al parecer, todas las culturas humanas
tienen al menos algunos artefactos producidos por el efecto trinquete. Tomasello y ha sostenido
que la evolución cultural acumulativa depende del aprendizaje imitativo y de la enseñanza activa
impuesta por los adultos.
La evolución cultural acumulativa depende de dos procesos, la innovación y la imitación que
deben actuar dialecticamente a lo largo del tiempo. El hecho es que el aprendizaje imitativo
(con o sin enseñanza activa) posibilita el tipo de transmisión fiel necesario para mantener la
nueva variante en el grupo, a fin de proveer una plataforma para otras innovaciones; estas
innovaciones.
Las tradiciones culturales humanas, pueden ser fácilmente distinguidas de las tradiciones
culturales de los chimpancés porque acumulan modificaciones, es decir, porque tienen una
historia cultural. Esto, porque los procesos de aprendizaje cultural en que se basan son