
En primer lugar, hay que destacar que Chomsky toma al lenguaje como un objeto natural, es decir como
cualquier otro sistema biológico, por lo tanto plantea que el lenguaje está regulado por mecanismos de índole
biológico.
El pensamiento Chomskiano se divide en tres programas de investigación que se producen en tres momentos
distintos: el primero de ellos fue en la década del 60 y 70 (G.Gen.). El segundo fue en la década del 80, donde
el interés estaba centrado en cómo se produce la adquisición del lenguaje, y la teoría que lo explicaba era la
teoría de “principios y parámetros”. El tercer programa del pensamiento Chomskiano esta llevado adelante por
el programa minimalista, en la década del 90, y el minimalismo biolingüístico, en el año 2000. En esta tercera
instancia, el pensamiento Chomskiano estaba interesado por saber cuáles eran las propiedades del lenguaje que
permitían que éste funcione de esa manera. Además se va a interesar por el diseño y el funcionamiento de la
facultad del lenguaje. Cabe destacar que tanto en el segundo como en el tercer programa de investigación
Chomsky defiende la existencia de la GU. En cada programa la modifica en cuanto a su contenido y su
funcionamiento pero nunca pone en duda su existencia.
Década del 80: “Teoría de principios y parámetros”
Chomsky va a preguntarse como el hombre adquiere su lenguaje, y para eso va a plantear una Gramática
Generativa, que es la teoría que va a tratar de explicar cómo desde un estado inicial (GU) el hombre llega al
conocimiento de una lengua particular.
Chomsky se pregunta si existe alguna propiedad de la mente/cerebro que le permita al ser humano llegar al
conocimiento de una lengua, a diferencia de otras especies que no tienen la misma capacidad. Llega a la
conclusión de que el hombre posee una facultad lingüística (FL) diferenciada, propia del ser humano, que le
permite adquirir una lengua. Esta facultad diferenciada es la “Gramática universal” (GU), un componente de la
mente- cerebro, sistema de principios y parámetros común a todas las lenguas. Ésta es una facultad lingüística
genética e innata, de carácter biológico que permite acceder a una lengua particular mediante la interacción con
la experiencia. Se la llama también “estado inicial”.
Para explicar la GU Chomsky, también parte del “problema de Platón” también llamada “pobreza de
estímulos”. Anterior a Chomsky se pensaba que la adquisición del lenguaje solo era posible a través de un
sobreaprendizaje por parte del niño. Es decir, la adquisición del lenguaje estaba determinada por el contacto
por parte del niño con respecto a los datos disponibles que le ofrecía la experiencia. Por el contrario, Chomsky
plantea que se da una pobreza de estímulos y de datos disponibles. El niño adquiere un sistema tan complejo
como el lenguaje sin la ayuda de tanta instrucción o datos disponibles, es decir con muy pocos estímulos.
Chomsky se va a preguntarse por qué esto es así y va a atribuirlo también a la existencia de la GU.
A partir de este estado inicial (GU) y el contacto con la experiencia, el niño paulatinamente o gradualmente
se va a ir apropiando de todo el lenguaje, hasta llegar a un estado estable, que posteriormente puede
experimentar una modificación periférica, es decir adquirimos un modo particular de hablar o expresarnos. En
el estado estable el niño incorpora una lengua I, que es el estado de poseer o conocer una lengua determinada.
A través de estas teorías de Chomsky, se produce un desplazamiento de la lengua exteriorizada (lengua E) a
la lengua interiorizada (lengua I).
La lingüística estructuralista, la psicología conductista, entre otras disciplinas van a plantear que el lenguaje es
una colección de formas lingüísticas (palabras, frases y oraciones), es decir se van a interesar por estas formas
lingüísticas exclusivamente, por las oraciones o frases ya hechas y producidas por un sujeto. Chomsky va a