
Hasta que se produce la denominada “subida de la leche”1 , el bebé puesto al pecho
adecuadamente, al menos 8 veces cada 24 horas, toma el alimento “fabricado” para sus
primeros días de vida, el calostro, que cubre todas sus necesidades. Su aspecto es más
viscoso que la leche, contiene más proteínas, sales minerales y menos grasas que la leche
definitiva. Por su alto contenido en anticuerpos es especialmente beneficioso para protegerle
de infecciones. Su composición especial es de gran ayuda para mejorar la digestión del
alimento y ayuda a la expulsión de las primeras deposiciones (meconio).
A partir del 4º día y hasta el 10º-15º día el calostro va transformándose en la llamada “leche
de transición”, y a partir de entonces la leche alcanza la composición de “leche madura”.
Conviene saber que la “leche madura” varía su composición a lo largo del día, incluso durante
la misma toma. La naturaleza es sabia y estos cambios fisiológicos que ocurren en la leche
se adaptan a las necesidades del bebé. 1 Las mujeres españolas utilizan la expresión “subida”
de la leche, las mujeres hispanoamericanas “bajada”
1. LA LECHE MATERNA: SÓLO VENTAJAS 6 Al principio de la toma la leche es más
ligera (para ir adaptando al aparato digestivo) y al final más rica en grasas, por tanto, es la
que más sacia. Por este motivo no conviene mirar al reloj para saber si “ha terminado su toma
o no”, eso sólo lo sabe el bebé y lo demostrará soltándose del pecho espontáneamente. Las
tomas de la noche ayudan a conciliar el sueño porque contienen endorfinas, sustancias que
inducen al sueño. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Comité de Lactancia de
la Asociación Española de Pediatría (AEP) recomiendan la alimentación exclusiva al pecho
durante los primeros 6 meses de vida. Hasta entonces no necesitan ningún suplemento de
alimento o bebida, ni siquiera agua, a no ser que exista una indicación expresa por parte del
pediatra. A partir de los seis meses y hasta los 2 años de edad, recomiendan seguir con
lactancia materna, e ir introduciendo, de forma complementaria, otros alimentos. El tiempo
límite para seguir dando el pecho lo ponen la madre y el bebé. Es posible mantener la
lactancia durante un tiempo prolongado, sólo con dos tomas diarias