Las reglas del método sociológico – Durkheim
Hechos sociales: consisten en modos de hacer, de pensar de sentir, exteriores al individuo.
Y se les reconoce por la particularidad de que son susceptibles de ejercer una influencia
coercitiva sobre las conciencias individuales.
No puede confundirse con los fenómenos orgánicos ya que consiste en representaciones y
actos. Ni con los fenómenos psíquicos, los cuales solo existen en las conciencias
individuales.
Hoy día es indiscutible que la mayoría de nuestras ideas y de nuestras tendencias no son
elaboradas por nosotros, sino que nos llegan desde afuera, y solo pueden penetrar en
nosotros imponiéndose. Podemos confirmar mediante una experiencia nuestra definición:
la forma en la que se educa a los niños. Desde edades tempranas los obligamos a comer,
a beber, a dormir horas regulares, los coaccionamos a la limpieza, la obediencia, etc. Y si
con el tiempo dejan de sentir esta coacción es porque poco a poco engendra hábitos.
La presencia del poder de coacción puede identificarse, bien por la existencia de alguna
sanción o por la resistencia que nos lleva a oponernos a ella.
Aunque un pensamiento exista en todas las conciencias, o un movimiento lo repita todos
los individuos, no por eso son hechos sociales. Lo que los constituye son las creencias, las
tendencias o las practicas del grupo considerado colectivamente.
Una proposición básica del método: debe tratar a los hechos sociales como si fueran
cosas. No decimos que son cosas materiales, sino que son cosas como las cosas
materiales, pero de forma diferente.
¿Qué son las cosas? Son todo objeto de conocimiento que no se compenetra con la
inteligencia de forma natural. Todo lo que el espíritu no puede llegar a comprender mas
que por la vía de la observación y la experimentación.
Los fenómenos sociales son exteriores al individuo. Los hechos de la vida individual y de la
vida colectiva son heterogéneos.
La síntesis sui Genesis que constituye toda sociedad produce fenómenos nuevos,
diferentes de los que acontecen en las conciencias solitarias, estos hechos residen en la
sociedad misma que los hombres producen y no en sus partes. En este sentido son
exteriores al individuo.
Nuestra definición abarca todo lo definido si decimos que “un hecho es toda manera de
hacer, establecida o no, susceptible de ejercer sobre el individuo una coacción exterior”