ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA II
Gabriela Natalia Ávila
El sistema biliar es un sistema tridimensional de conductos de diámetro
creciente por el que atraviesa la bilis desde los hepatocitos hacia la vesícula biliar y
desde allí hasta el intestino.
El sistema biliar intrahepático comienza con los capilares biliares. Los capilares
biliares no poseen pared propia, sino que están excavados entre células hepáticas
contiguas, sus límites están formados por las membranas plasmáticas de los
hepatocitos y sus uniones ocluyentes. Los canalículos (o capilares biliares) forman
una red de túbulos, tridimensional, y cuando emergen de la periferia se continúan
con los conductos de Hering, que sí contienen pared de células cúbicas y son de un
trayecto corto. Son colectores de la bilis proveniente de los hepatocitos y la
conducen a la periferia del lobulillo (en el sentido contrario a la sangre). Los
conductos de Hering desembocan en conductos biliares perilobulillares, que luego
desembocan perpendicularmente en los conductos biliares interlobulillares, que son
los que se visualizan en el espacio porta. Todo este sistema de conductos está
revestido por epitelio cúbico simple.
Los conductos interlobulillares drenan en conductos más grandes, de epitelio
cilíndrico, y rodeados por tejido conectivo denso.
Los conductos biliares extrahepáticos, emergen del hígado y son los conductos
biliares derecho e izquierdo, que confluyen en el conducto hepático, que deposita
la bilis en el conducto cístico, y de ahí la envía a la vesícula biliar, donde se
concentra y almacena. Ante un estímulo, es secretada hacia el conducto cístico y
luego al colédoco. Estos conductos poseen epitelio cilíndrico simple, rodeado de
tejido conectivo rico en fibras elásticas y linfocitos y células musculares que
aumentan a medida que se acercan al duodeno. Es frecuente la presencia de
glándulas tubuloalveolares simples con células mucosas.
Vesícula biliar
Histológicamente, consta de cuatro capas: mucosa, muscular, perimuscular y serosa
o adventicia (adventicia en la porción adherida al hígado).