reconocido, son los fallidos, los olvidos, los chistes, el relato de un sueño, un síntoma. En esa época para Lacan
el análisis implicaba una relación intersubjetiva, por eso habla de interlocución. Habla de locución e inter-
locutario. La realización del sujeto, vía el análisis, tiene que ver con alcanzar un reconocimiento del otro y un
saber respecto de su deseo. La dialéctica del reconocimiento como sujeto se vincula con la palabra plena, por
medio de la cual se hace posible un acercamiento al deseo del sujeto. Va en el eje de una relación simbólica, de
un sujeto a otro (aquí para Lacan el analista es un sujeto, luego dirá que el analista no debe actuar como sujeto,
que su inconsciente no tiene que estar ahí). En este momento en el análisis hay dos sujetos, el analizante y el
analista. En este momento Lacan considera que la palabra dice algo del deseo del analizante, como motor del
psiquismo, luego dirá que no, que algo se podrá decir o saber del deseo, pero que éste es incompatible con la
palabra. Luego dirá que la relación analítica no debe ser intersubjetiva, entre dos sujetos.
Aún la mentira en un discurso, supone un lugar donde la verdad está.
El psicoanalista sabe mejor que nadie que la cuestión en el psicoanálisis es en qué parte del discurso está el
término significativo. Cómo opera el analista en el discurso del paciente: tomando el relato de una historia
cotidiana como una larga prosopopeya (animar algo que se halla inanimado. Afectación en la manera de ser o
hablar- de toda la historia que cuenta sólo se tomará la manera en que se dice-) a la cual deja pasar, y sí toma
como cargado de valor aquellas expresiones repentinas, impremeditadas que dan cuenta del estado de ánimo.
Una historia cotidiana la toma como una fábula moralizante y la deja pasar sin darle importancia, una larga
prosopopeya, aquella afectación en la manera de ser o hablar la tomará como una interjección directa, como una
voz con que se expresa repentina e impremeditadamente un estado de ánimo.
Los lapsus, los silencios también poseen valor de palabra plena. El sentido de lo que el sujeto dice se construye
a partir de la puntuación del analista, el sentido de lo que uno dice lo constituye el otro. Siempre para toda
locución hay un alocutario (el que recibe un mensaje), aunque hable a las paredes, es el otro el que le da la
sanción del sentido de lo que uno dice.
Puntos a tener en cuenta del texto: Concepto de verdad, de historia, de inconsciente, palabra vacía,
palabra plena, articulación entre palabra y lenguaje, diferencia entre lenguaje y palabra.
La historia se construye en la palabra dirigida al analista.
Si el sujeto fuera un libro el inconsciente es el capítulo censurado.
Método psicoanalítico: es la asunción del sujeto de su historia, en cuanto está constituida por la palabra
dirigida al otro.
El inconsciente como el capítulo censurado, es aquella parte del discurso concreto en cuanto transindividual
que falta la disposición del paciente para establecer la continuidad de su discurso consciente, es la parte que
falta para reestablecer la continuidad y que todo el discurso sea consciente, es el capítulo censurado.
¿Cuál es el sentido del retorno a Freud que plantea Lacan?
Es el retorno al sentido de Freud, a la novedad que significa Freud por su descubrimiento, en la medida en que
ésta novedad ha sido olvidada por los seguidores de Freud (según lo que Lacan considera). Critica el camino
tomado por la psicología Norte Americana, no es recurrir a un dicho de Freud, sino leer a Freud a la letra para
considerar los dichos a la luz del decir freudiana.
Lacan:
• Decir: es el sujeto, el modo enunciativo, desde dónde se dice, en qué contexto.
• Dicho: es un enunciado