
CIITA, HET-E y TP1), que permite al NLR unirse a otro y
formar oligómeros; y un dominio efector, que recluta otras
proteínas para formar complejos transmisores de señales.
Hay tres subfamilias de NLR, cuyos miembros usan
diferentes dominios efectores para iniciar las señales,
llamados dominios CARD, Pirina y BIR. Los NLR se
encuentran en una amplia variedad de tipos celulares,
aunque algunos NLR se distribuyen en tejidos concretos.
Algunos de los NLR mejor estudiados se encuentran en las
células inmunitarias e inflamatorias y en la barrera epitelial.
Citoplasmáticos exclusivamente!!! (es la
contraparte citosólica de los TLR).
Reconocen PAMPs que llegan al citoplasma y
DAMPs.
Forman complejos proteicos: INFLAMASOMA.
INFLAMASOMA: activan la producción de
citoquinas, quimioquinas y sustancias microbicidas
La subfamilia NLRP de NLR responde a PAMP y DAMP citoplásmicos, formando complejos transmisores de
señales llamados inflamasomas, que generan formas activas de la citocina inflamatoria IL-1.
Las respuestas del NLRP-inflamasoma las induce una amplia variedad de estímulos citoplásmicos, como
productos microbianos, cristales de origen ambiental o endógeno y la reducción de las concentraciones
citoplásmicas del ion potasio (K+ ), que se asocia a menudo a las infecciones y al estrés celular
RECEPTORES TIPO RIG-1: RLR
Los receptores del tipo RIG (RLR) son detectores citosólicos del ARN vírico que responden a ácidos
nucleicos víricos, induciendo la producción de interferones antivíricos del tipo I.
Los RLR pueden reconocer ARN bicatenario y unicatenario, lo que incluye los genomas de virus ARN y
transcriptos de virus ARN y ADN.
Los dos RLR mejor caracterizados son RIG-I (gen inducible por ácido retinoico I) y MDA5 (gen asociado a
la diferenciación del melanoma 5).
Estas proteínas contienen dos dominios de reclutamiento de caspasa N terminales, que interactúan con otras
proteínas transmisoras de señales, y un dominio ARN-helicasa de función desconocida. RIG-I y MDA5 muestran
diferentes especificidades por el ARN vírico, en parte por la longitud del genoma del ARN bicatenario, lo que
puede aumentar la sensibilidad en la detección de una amplia variedad de ARN bicatenarios con longitudes
heterogéneas. Los RLR también pueden discriminar el ARN unicatenario vírico de los transcriptos de ARN
unicatenarios celulares normales. Por ejemplo, RIG-I solo reconocerá ARN con una estructura 5’ trifosfato, que
no está presente en el ARN citoplásmico de la célula anfitriona del mamífero por la adición de un capuchón de
7-metilguanosina o la eliminación del 5’ trifosfato.
Los RLR se expresan en una amplia variedad de tipos celulares, incluidos los leucocitos derivados de la médula
ósea y varias células tisulares. Por tanto, estos reeptores capacitan a muchos tipos celulares proclives a la
infección por virus ARN a participar en las respuestas inmunitarias innatas frente a estos virus. Al unirse al ARN,
el RLR inicia las señales que conducen a la activación de IRF3 e IRF7, y estos factores de transcripción inducen
la producción de interferones del tipo I.