
CAPITULO 13. MÁS ALLA DE CINCO.
La configuración representa un grupo de cinco fuerzas que arrastran a las organizaciones en cinco direcciones
diferentes:
1) El arrastre ejercido por la cumbre estratégica para centralizar, para coordinar por supervisión directa, y así
estructurar la organización como una Estructura Simple.
2) El arrastre ejercido por la tecnoestructura, para coordinar por estandarización para incrementar su
influencia, y así estructurar la organización como una Burocracia Mecánica.
3) El arrastre ejercido por los operadores para profesionalizar, para coordinar por la estandarización de
destrezas a fin de maximizar su autonomía, y estructurar así la organización como una Burocracia Profesional.
4) El arrastre ejercido por los gerentes medios para balcanizar, para que se les dé la autonomía de manejar sus
propias unidades, con la coordinación restringida a la estandarización de productos, y así estructurar la organización
como una Forma Divisional.
5) El arrastre ejercido por el staff de apoyo (y por los operadores también, en la Adhocracia Operativa), por
colaboración (e innovación) en la decisión, para coordinar por ajuste mutuo, y así estructurar la organización como
una Adhocracia.
La configuración MISIONERA tiene su propio mecanismo coordinador clave: la socialización o estandarización de
normas; y un parámetro de diseño principal correspondiente: el adoctrinamiento; y una sexta parte clave de la
organización: la ideología.
La configuración Misionera pura es construida alrededor de una misión inspiradora y un grupo acompañante de
creencias y normas. La configuración Misionera es una forma de Burocracia, ya que coordina basándose en la
estandarización de normas, es además inflexible y no adaptable: la misión tiene que ser diferenciada e inspiradora,
pero ni ésta ni el grupo de normas que la rodean pueden ser cambiadas.
Una división de trabajo floja existe en toda ella, con rotación de tarea en vez de especialización de tarea, y mínima o
aun ninguna distinción entre gerente y operador o entre línea y estado mayor (staff). La organización logra la forma
más pura de descentralización, sin ningún grupo privilegiado (es la configuración más cercana al ideal democrático,
aunque requiere un fuerte y carismático liderazgo y una Estructura Simple como condición primordial para crear la
ideología). El agrupamiento es sobre base de mercado (misión) en una unidad relativamente pequeña. Si la
organización crece, tenderá a seguir dividiéndose en unidades pequeñas (o enclaves), cada una autónoma excepto
por su participación en la ideología común. El contacto personal es el único camino para mantener la fuerte
ideología.
La configuración Misionera perfecta tiende a exhibir una ausencia de otras: casi ninguna supervisión directa ni
estandarización de trabajo o productos o destrezas; luego, mínima jerarquía, ninguna tecnoestructura, casi ninguna
línea media, y una virtual ausencia de formalización, capacitación externa, planeamiento de la acción y control de
desempeño. Cualquiera sea el ajuste mutuo necesario para reforzar la estandarización de normas, éste puede ser
logrado informalmente, con poca necesidad de dispositivos de enlace semiformales.