Auge y caída del Concierto Europeo y
su relación con las guerras mundiales
Magíster en RR. II
Curso: Historia de las RR.II
Catedrático: Dr. Eduardo Araya Lëupin
Autor: Héctor Oyarzún Sirias
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Magíster en RR. II
Catedrático: Dr. Eduardo Araya L.
Autor: Héctor Oyarzún Sirias
Auge y caída del Concierto Europeo
y su relación con las guerras mundiales
Auge y caída del Concierto Europeo y su relación con las guerras mundiales
Introducción
Para Kissinger
1
, el primer intento de institucionalizar un orden mundial fue la Paz de Westfalia , que trajo consigo
la elaboración de principios clave para el desarrollo de las relaciones internacionales, como el equilibrio del poder, la no
intervención en los asuntos internos de los países soberanos, la inviolabilidad de las fronteras y la soberanía de los Estados.
A este sistema que propendía evitar una nación hegemónica se le hizo cada vez más difícil mantener el equilibrio de poder.
Por un lado, Richelieu y Mazarino pusieron en ventaja a Francia siendo una potencia importante en materia militar. También
frustraron a los Habsburgo y el Sacro Imperio romano-germánico que fue dividido entre más de trescientos estados
soberanos, siguiendo cada uno de ellos una política exterior independiente. Por otro lado, quedó en manifiesto la incipiente
aparición de Prusia y Rusia como potencia, y la rivalidad que se venía arrastrando con Gran Bretaña. El vacío de poder en
Europa Central, despertó el apetito expansionista, por ejemplo, sobre los Países Bajos defendidos por Guillermo De Orange.
No está demás señalar que, la primera revolución industrial y la revolución francesa terminaron de trastocar el ya frágil
equilibrio europeo que mantuvo la paz
2
por ciento cincuenta años.
El presente trabajo, tiene por objetivo explicar el desarrollo del Concierto Europeo como sistema restaurador del equilibrio
de poder. Para ello, se periodizaron seis distintas etapas mostradas en el cuadro adjunto
3
. En las primeras cinco se analiza
el rol de los actores, sus intereses, alianzas y se distinguen elementos de continuidad-cambio. En la sexta, se analiza de
manera comparada las crisis que dan origen a las guerras mundiales. Con respecto a este último capítulo, es necesario
advertir que el análisis de las guerras mundiales como parte del mismo proceso no es una tesis propia, más bien fue expuesta
por el Dr. David Stevenson y por el Dr. Eduardo González Calleja, la cual es rescatada en este trabajo
4
.
Revoluciones burguesas e industrial (1776-1815)
Antes de la primera revolución industrial (1780), Europa se regía bajo el mercantilismo, y por tanto, las economías
se basaban en la extracción agrícola
5
y en la acumulación de metales preciosos. En lo político, la mayoría de los regímenes
estaban constituidos como monarquías absolutas y como se mencionó, la monarquía francesa tenía ciertas ventajas. Sin
embargo, Gran Bretaña desarrolló una monarquía liberal a partir de la Revolución Gloriosa (1688), que le permitió fortalecer
a la burguesía, haciéndola capaz de hacerse de capital para adquirir materias primas, generar innovaciones y posteriormente
maquinarias para mejorar y hacer eficiente las industrias. En palabras de Hobsbawm, este despegue hacia el crecimiento
auto-sostenido permitió lograr una revolución industrial que a posteriori también benefició a Bélgica y Francia.
Por otro lado, la monarquía francesa tenía un paupérrimo pasar económico y socio-político debido a la excesiva contribución
a los emergentes de las colonias estadounidenses que logran su independencia en 1776, la negativa de dos tercios de los
Estados Generales (Nobleza y Clero) al aumentar los tributos y la propagación de ideas ilustradas. Así, los burgueses que
tenían capital mas no poder político, organizaron la revolución en 1789. Una vez instalados los revolucionarios, en diez
años fue sumamente complicado lograr un gobierno estable. Gracias al apoyo de los directores Sieyés y Talleyrand,
orquestaron un golpe de estado en el que Napoleón se hizo del poder en 1799. Rápidamente Napoleón logra la estabilidad
que tanto necesitaba
6
, sin embargo, las monarquías aledañas perciben a Francia como una amenaza y comienzan a gestar
una serie de coaliciones
7
para frenar sus aspiraciones imperiales, pero las primeras seis no impiden que Napoleón domine
prácticamente todos los confines europeos. No es hasta la séptima coalición la que logra vencer a los franceses. Como
muestra el cuadro del anexo 7, los miembros menores de las alianzas (pequeños estados italianos y alemanes) elegían sus
aliados teniendo en cuenta a que bando pertenecían sus enemigos locales, por ejemplo, el Reino de Nápoles cooperaba con
Napoleón, mientras que el Reino de Sicilia hacía lo propio con el Reino Unido. Estos últimos, eran el principal adversario
francés y la potencia encargada de negociar cada una de las alianzas a través de las gestiones del Primer Ministro W. Pitt.
Como muestra el mapa N°1
8
, Prusia y el Imperio Austriaco claramente advertían la potencial amenaza sobre su territorio.
Así mismo, Otro actor relevante fue el Imperio Ruso, quien a través del Zar Alejandro I promovía “la guerra patriótica”
contra Francia, ya que la anexión de Galitzia Oriental por parte del Gran Ducado de Varsovia, Estado satélite de Francia y
la imposición del bloque económico a Gran Bretaña, uno de sus socios importantes, afectaba seriamente el interés nacional
del imperio. Napoleón decide invadir Rusia en 1812. Gracias a la inteligencia rusa al implementar tácticas de guerrilla y al
implacable invierno, mermaron las fuerzas de Napoleón en un 80%. Finalmente, en la Batalla de Waterloo (1875) Napoleón
es derrotado y las potencias vencedoras tenían la enorme tarea de reconfigurar el mapa europeo cambiado sustancialmente
por Napoleón.
Los congresos europeos (1815-1848)
Los acuerdos de paz para restaurar el mapa europeo se hicieron considerando los intereses de las potencias
vencedoras: Imperio Ruso, Gran Bretaña, Imperio Austro-húngaro y Prusia, sin considerar a los pueblos desplegados en los
territorios
9
. Así, mediante una serie de congresos diplomáticos como el de Viena (1815), Aquisgrán (1818), Verona (1822),
Munchengratz (1830) entre otros, se buscaba crear un nuevo orden internacional que llenase el vacío de poder dejado por
la Francia napoleónica en Europa y restaurar los principios ideológicos absolutistas. Este sistema conocido como el
concierto europeo logró evitar el enfrentamiento directo de las potencias (con algunas fisuras como la guerra de Crimea
analizada más adelante) hasta 1914. Un elemento importante es la concreción de varias alianzas diseñadas para mantener el
equilibrio de poder. Un dato no menor, es que en Aquisgrán se decide integrar a Francia para ser parte de los acuerdos de
la cuádruple alianza, un pacto de seguridad para evitar nuevas guerras europeas conformado por Austria, Prusia, Imperio
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y su relación con las guerras mundiales
Ruso, Gran Bretaña y Francia. Así, la Cuádruple Alianza velaba por la seguridad geopolítica y la Santa Alianza para tener
estabilidad interna.
Cabe destacar que las ideas liberales de la Revolución Francesa rebrotaron en diferentes lugares como Nápoles, Piamonte,
Portugal, España, Bélgica, Grecia e incluso se manifestaron revueltas en las potencias. Ante esto, se crea la Santa Alianza,
compuesta por el Imperio Austriaco, Ruso y el Reino de Prusia para defender los principios absolutistas poniendo como
base el catolicismo, dejando fuera a Gran Bretaña y el Imperio Otomano, no obstante esta alianza evitó en gran medida el
contagio revolucionario y sofocó los focos revolucionarios. Luego de las revoluciones de 1820 y 1830 se genera una tercera
ola revolucionaria en 1848 caracterizada por el nacionalismo y la movilización del movimiento obrero (recordemos que en
este año se publicó el manifiesto comunista de Marx) causando levantamientos en los Reinos de Francia, España, en los
Estados Alemanes e Italianos, en el Imperio Ruso y Autro-Húngaro. A pesar que no prosperaron, quedó en manifiesto que
los principios absolutistas no podían permanecer de manera perpetua.
Al otro lado de Europa, EEUU vive una relativa calma gozando de la democracia Jacksoniana y a pesar que existían grupos
descontentos como el Partido de los Trabajadores, la revolución social al estilo del viejo mundo no era una opción. En
cuanto a la política exterior, la Doctrina Monroe planteaba “América para los americanos” que consistía en no inmiscuirse
en asuntos europeos, precisamente a las maniobras de la Santa Alianza para restaurar el absolutismo, al tiempo que ellos
tampoco se inmiscuyeran en los asuntos americanos.
Mirando al continente asiático, en 1848 el capitán James Glynn visia Japón y recomendó al Congreso Estadounidense
negociar un acuerdo comercial, incluso por la fuerza, provocando la posterior visita del Comodoro Perry que acabarían con
el aislamiento de 251 años por parte de Japón.
Se arraiga el nacionalismo y emergen nuevos actores (1848-1871)
Desde el Congreso de Viena (1815) el equilibrio europeo se había logrado mantener
10
, sin embargo, la llega del Zar
Nicolás I de Rusia, revivió el antiguo sueño ruso de conquistar Constantinopla y los estrechos utilizando como pretextos
reclamaciones religiosas. Así, Gran Bretaña que buscaba frenar el avance ruso hacia los Dardanelos y previendo la
confrontación por la cercanía rusa en la colonia de la India, decide apoyar a los otomanos. Por otro lado, la Francia de
Napoleón III, estaba interesada en revisar el acuerdo de Viena que prohibía explícitamente a la familia Napoleón hacerse
del trono de Francia, para ello necesitaba debilitar a la Santa Alianza por lo que decide inmiscuirse en el conflicto. El
Imperio Autro-Húngaro por su parte, se vio en una gran encrucijada. Por un lado, valoraban la alianza con los rusos, pero
de mantener su apoyo, entregaban una excusa a los franceses para atacar los territorios austriacos en Italia. Por el otro, el
avance ruso hacia los Balcanes era motivo de preocupación y generaba incomodidad. A pesar de tratar de mantenerse
neutrales, los intereses nacionales en Italia fueron más poderosos y se pusieron de lado de los franceses. Este quiebre en la
Santa Alianza creó un desequilibrio que se vería manifestado en una serie de conflictos en la región.
En otro ámbito, el romanticismo alemán que promulgaba entre otras cosas el nacionalismo y el liberalismo llegó a Italia a
través de las revoluciones de 1848. Este movimiento permitió las cohesiones nacionales que terminan finalmente por
unificar a Italia (1861) y Alemania en (1871). La derrota definitiva de Napoleón III en la guerra franco-prusiana, además
de la anexión del Alsacia y Lorena por parte del Imperio Alemán, dejó a Alemania mejor posicionado que el resto de los
actores en el sistema internacional (nueva potencia hegemónica), desplazando así a Francia y acabando definitivamente con
el sueño de esta: hacerse con el centro de Europa.
Cambio de alianzas y aflora la Weltpolitik (1871-1888)
La segunda revolución industrial, hizo entrar en escena a Japón, EEUU y Alemania como grandes potencias
industriales. A pesar del auge económico, había tareas pendientes en lo político, por lo que la política de Bismarck se
centraba en lograr la estabilidad alemana, por ello había que evitar como sea entrar en confrontación con Gran Bretaña, pero
estos últimos con su política aislacionista venían poniendo énfasis en su interés nacional situado en sus colonias fuera de
Europa y no en la ideología. Para lograrlo, Bismarck se plantea el aislamiento de Francia a través de tres sistemas
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con
Austria, Rusia, posteriormente Italia y manteniendo contacto con Gran Bretaña. Así, este periodo está protagonizado por el
Emperador Guillermo II y Bismarck mediante la realpolitk, ya no basada en valores conservadores de la Santa Alianza, sino
en las capacidades y el uso de la fuerza.
El Imperio Ruso por su parte, no cesó su aspiración de llegar al mar mediterráneo tomando el rol de potencia revisionista y
aprovechando los levantamientos de 1875-1876 en Bosnia, Serbia y Bulgaria consiguiendo la victoria. Austria y Gran
Bretaña rechazaron las condiciones de paz impuesta a los Otomanos y Alejandro II fue llevado a resolver la cuestión
balcánica a través del Congreso de Berlín de 1878 donde las grandes potencias se repartieron los Balcanes
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, al igual que en
Viena, no considerando la división de los pueblos, sino solamente de los territorios, error que traería grandes consecuencias
posteriores. Este hecho fue considerado una humillación por parte de los Austriacos a Rusia.
En 1880 en el Reino Unido gana las elecciones Gladstone, quién rompe con el aislacionismo británico que represenun
cambio importante en su política exterior. Planteaba que, Europa debía actuar conjuntamente o Gran Bretaña no actuaría
del todo, siendo la primera aproximación a lo que conocemos como seguridad colectiva.
En 1885 otra gran reunión organizada por Bismark se realizó en Berlín: La conferencia de Berlín. Esta vez, representante
de trece países europeos
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y Estados Unidos arreglaron la repartición del continente africano.
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y su relación con las guerras mundiales
Una vez que Guillermo II asume el Imperio Alemán en 1888, Bismark pierde influencia y desaparece del plano político y
Guillermo instala la Weltpolitik (política global) de carácter ofensiva y la búsqueda de nuevas colonias.
El reparto imperialista y el apetito de las nuevas potencias (1888-1914)
A pesar de haber llegado tarde al festín colonial, Guillermo II creó una importante armada con la intención de
equipararse a la Real Armada Británica, lo que le permitió meterse a la disputa por territorios de ultramar. En poco tiempo
se hizo de Tanganica, Ruanda, Burundi, Tanzania en África, Islas Salomón y Marshall en Oceanía, Kiau Chau y Tianjín
en Asia, entre muchas otras. Claramente, esto provocó la preocupación y descontento de las otras potencias coloniales.
En este periodo, las alianzas que terminarían enfrentadas en la I Guerra Mundial comienzan a consolidarse. Las relaciones
entre Italia y Austria se vieron sumamente tensas, por la ocupación itálica del puerto de Massawa, Eritrea. Alemania hizo
un importante esfuerzo diplomático para evitar el conflicto, por ello Italia se compromete a apoyar la frontera sur de
Alemania en una eventual guerra franco-alemana y así Italia se incorpora a la Triple Alianza. El Káiser Guillermo, valora
que el Tratado de Reaseguro firmado con Rusia en 1887 que consistía en la neutralidad alemana ante un inminente ataque
a Prusia y la neutralidad de Rusia en un enfrentamiento entre Francia y Alemania, iba contra la Triple Alianza. A pesar que
el Káiser buscó aplicar constantemente la máxima divide et impera, tras romper con Rusia era inevitable acercamiento entre
Francia y Rusia materializándose en un acuerdo en 1890. En 1904, hicieron lo mismo Francia e Inglaterra limando viejas
asperezas. En la misma línea, tras los roces entre Rusia y Gran Bretaña por las disputas coloniales en Persia, El Tíbet y
Afganistán, llegan a un acuerdo en 1907 e impulsaron la Triple Entente. Guillermo II, siempre mantuvo en el cálculo que
Francia no estaba preparada para ir a la guerra, puesto que no confiaba que tan certero sería el apoyo británico, y como
sabemos incurrió en un error. Así, en medio de una paz armada, era cosa de tiempo que el conflicto comenzara.
Tras las dos guerras de los Balcanes
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que terminan expulsando al Imperio Turco Otomano de Europa, esta región se volvió
un avispero puesto que como hemos repasado a lo largo de este trabajo, una vez más se construyeron límites en función del
territorio y no de la población respetando las etnias, quedando así, gente en el lado equivocado de la frontera. Coexistía una
Serbia ortodoxa apadrinada por el Imperio Ruso, una Bosnia y Herzegovina musulmana y cristiana, Albania
mayoritariamente musulmán, y así dentro de cada Estado coexisten diversas identidades culturales hasta nuestros días.
A pesar que el Zar Nicolás II tenía problemas internos que podrían poner en riesgo la seguridad y estabilidad del Imperio,
decidió continuar a toda costa con el apoyo a Serbia, ya que por sobre el argumento religioso, el país báltico le proporcionaba
una gran ventaja estratégica en caso de enfrentarse con el Imperio Austro-húngaro, ya que ellos tendrían que dividir sus
fuerzas
15
.
En este contexto, el 28 de junio de 1914 en un atentado en Sarajevo (Serbia) murió el heredero al trono Austro-húngaro,
desatando según el profesor Stone, el accidente inevitable. Los austriacos no tardaron a declarar la guerra Serbia, y esto
activó los tratados de mutua defensa de la Triple Entente (por parte del Imperio Ruso) y los de la Triple Alianza por parte
del Imperio Austro-Húngaro, dando inicio a la Primera Guerra Mundial.
Segunda guerra de los treinta años: Primera y Segunda Guerra Mundial (1914-1945)
Cabe advertir que este acápite no se encuentra en orden cronológico puesto que su objetivo no es caracterizar las
etapas del conflicto, sino más bien, analizar de manera comparada los procesos de crisis que hicieron detonar las guerras
mundiales. El primer punto importante es que se retoma la tesis de la segunda guerra de los treinta años: las guerras
mundiales son producto del desequilibrio de fuerzas, por lo que el sistema internacional busca su “reacomodamiento
haciendo un símil con la teoría de placas tectónicas. En otras palabras, la IIGM no se puede explicar separándola de la IGM,
puesto que son parte del mismo proceso de reajuste. Existen varios elementos que se pueden analizar de manera comparada,
como elementos causales, el cambio de las alianzas, la entrada tardía de EEUU, las percepciones de amenazas, el rol de
Japón, entre otras.
En cuanto a elementos causales, ambas guerras tienen una marcada naturaleza ideológica. Según el profesor Stone, Todos
los gobiernos que declararon la guerra estaban convencidos de que actuaban en defensa de los intereses nacionales. Sin
embargo, lo que realmente ocupaba sus pensamientos era la idea imperial. Es importante señalar que la IGM acabó con
cuatro importantes imperios: Alemán, Austro-húngaro, Otomano y Ruso. En la tanto, la IIGM se vio marcada por la lucha
contra la ideología del nacismo y el fascismo.
Otro elemento característico presente en las dos guerras es el sentimiento revanchista. En la IGM el Imperio Ruso se sentía
doblemente humillado
16
: por el Imperio Austro-Hungría en la Guerra de Crimea (1853-1856) y por el Imperio Alemán
Humilla a Rusia en Congreso de Berlín 1878. A lo que la IIGM respecta, se ve caracterizada por el revanchismo alemán
severamente castigado en Versalles (1919) dejándolo sin flota, con reparaciones de guerra millonarias, (entre muchas otras),
motivo por el cual el discurso nazi tendría cabida.
Las aspiraciones expansionistas también estuvieron presentes en ambas guerras. En la IGM, el Imperio Alemán incomodó
a otras potencias como al Reino Unido por potenciar su aventura colonialista creando una flota comparable a la de la Real
Armada Británica. Durante la IIGM, Benito Mussolini también tiene aspiraciones expansivas al querer unir la África
Oriental Italiana con Libia, expandiendo su colonia sobre territorio británico
17
como se aprecia en el mapa.
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y su relación con las guerras mundiales
En términos de Waltz, también se puede comparar el sistema de alianzas en cada guerra. Bajo mi apreciación, en ambas
guerras estuvimos en presencia de bloques bipolares flexibles. La flexibilidad queda demostrada por el cambio de algunos
actores a la alianza contraria. Durante la IGM, Italia a pesar de haber ratificado por última vez su pertenencia a la Triple
Alianza en 1913, al estallar la guerra no ingresó inmediatamente y realizó su propio cálculo político desconociendo el
tratado. Así, buscando sus intereses propios inicia conversaciones secretas con Gran Bretaña firmando el Tratado de
Londres, el cual promete a Italia la anexión del Trentino, el Tirol meridional, Trieste, Istria y parte de Dalmacia. Por ello,
se une a la Triple Entente en contra de sus antiguos aliados, pero al final de la guerra no se producen las anexiones. Durante
la IIGM también se realizó un cambio de alianza, esta vez de la URSS. Nueve días antes de inciar la guerra, los Ministros
de Asuntos Exteriores Ribbentrop y Mólotov de Alemania y la URSS respectivamente, firman un tratado de no agresión.
Una de las tesis que se baraja al respecto es que, a pesar que el enfrentamiento era inevitable por que Hitler había manifestado
sus intenciones de extender su “lebensraum(espacio vital) en Mein Kampf (1925), los soviéticos deciden ganar tiempo
para prepararse y enfrentarlos de mejor manera. Sin embargo, queda en duda puesto que ulteriormente se encontraron
clausulas secretas del Tratado Ribbentrop-Mólotov que incluían la repartición de Europa una vez ganada la guerra.
La entrada tardía de EEUU también es un elemento a analizar, ya que me atrevería a decir que su intervención es tan
importante que cambia el curso de las guerras. Durante la IGM la excusa para entrar es el hundimiento del RMS Lusitania
en las costas irlandesas por parte de un submarino alemán. No obstante, EEUU ya era una potencia económica y por tanto
buscaba mejorar su posición en el plano político, por lo que puede considerarse una potencia revisionista en el sistema.
Prueba de ello, es que una vez terminada la guerra, el presidente Wilson propone los 14 puntos, que buscaba eliminar las
barreras al libre comercio, el fin de la diplomacia secrete, el ordenamiento del mapa europeo, un sistema de seguridad
colectiva coordinado por la Liga de Naciones, entre otras. En cambio, en la IIGM, EEUU decide entrar definitivamente tras
el ataque japonés a Pearl Harbor que destruyó siete acorazados, unos noventa barcos, doscientos cincuenta aviones y un
total de unos cinco mil hombres heridos o muertos. La industria estadounidense fue la más beneficiada, aún más
considerando que Europa había sufrido un enorme daño. Además, EEUU fue parte de los acuerdos de paz, los juicios y se
quedó con parte de los territorios como las Islas Marshall, colonia alemana antes de la IGM y japonesa hasta antes de la
IIGM.
La percepción de amenaza no es algo menor y los británicos tuvieron una reacción parecida en ambas guerras. Esta es una
tesis del profesor Stone, los barcos alemanes, que se desplazaban hacia el mar del Norte, plantearon el mismo tipo de
amenaza antes de 1914 que la fuerza aérea de Hitler antes de 1939. Esta situación, en lugar de acobardar a los británicos,
provocó que estableciesen alianzas.
En cuanto a lo que el rol de Japón se refiere, es sumamente interesante que para IGM fuese parte de la Triple entente y en
la IIGM parte del eje, es decir cambiante. En la IGM Japón venía de ganar dos importantes guerras, la guerra chino-japonesa
(1894-1895) y la guerra ruso-japonesa (1904-1905). Esto se explica porque el Shintoísmo que pregonaba un origen divino
de los emperadores japonés (desde el sol) estaban llamados a iniciar su expansión (imperialismo japonés). Durante la IGM,
los japoneses buscaban expandir su Esfera de Co-prosperidad de la Gran Asia Oriental y para ello debían ampliar su
influencia ante China. Por el contrario, en la IIGM la Esfera de Co-prosperidad de la Gran Asia Oriental se vio amenazada
por la expansión territorial de EEUU, por lo que decide entrar a la guerra como parte del Eje.
Trayendo a colación la primera guerra de los treinta años, una notable diferencia fue la inclusión de los vencidos en Viena:
Francia fue parte de la nueva configuración internacional. Mientras que Versalles, excluyó y castigó severamente a los
alemanes, los cuales evitablemente en el futuro pretendiesen quebrantar el acuerdo, a esto Kissinger lo denomina la
maldición del Tratado de Versalles
18
.
Al referirme a las consecuencias posteriores a las guerras, no se puede dejar fuera el hecho que al realizar los arreglos
fronterizos parte de los pueblos quedaron en la parte equivocada de la frontera debido a no considerar factores etno-
religiosos a la hora de hacer las modificaciones. Consecuencias de la IGM son los conflictos inherentes a los Balcanes y los
de la II guerra mundial se encuentran en medio oriente como resultado del acuerdo Sykes-Picot entre Gran Bretaña y Francia.
También se pueden mencionar los conflictos en áfrica relacionados a la descolonización.
Por último, es válido finalizar haciendo la comparación mediante la siguiente pregunta ¿Pudieron las potencias vencidas
haber ganado las guerras? A pesar que las respuestas están más en el plano especulativo que científico, el ejercicio permite
pensar en las distintas posibilidades de los actores en su despliegue táctico. En la IGM, creo que una vez conformada la
Triple Alianza y la Triple Entente era sumamente difícil una victoria alemana. En ese sentido, hubo dos errores de cálculo
de Guillermo II: el primero fue no renovar la alianza con el Imperio Ruso y el segundo, creer que Gran Bretaña y Francia
no estaban dispuestos a iniciar la guerra. Por otro lado, en la IIGM creo que el Eje sí tuvo un par de posibilidades de haber
ganado la guerra a los Aliados. La primera posibilidad radicaba en convencer a los japoneses de atacar al Imperio por
occidente en vez de iniciar la confrontación con EEUU. Dudo que el Imperio Ruso haya podido responder eficazmente por
ambos frentes considerando su extenso territorio. La segunda posibilidad estaba en no dividir en tres las fuerzas alemanas
en la operación Barba Roja. Esto fue decidido por Hitler, incluso siendo advertido por sus oficiales.
Concluyo apoyando a Kissinger (1996) al advertirnos que, “Analizados de forma retrospectiva, todos los sistemas
internacionales parecen haber guardado una inevitable simetría. Una vez establecidos, resulta difícil imaginar cómo habría
evolucionado la historia si se hubiesen tomado otras decisiones o, más bien, si hubiese sido posible tomar otras decisiones”.
Bibliografía Consultada
Callejas, E (2014) La continuidad entre las dos guerras mundiales.
Obtenido de: http://blogs.elpais.com/papeles-perdidos/2014/06/index.html
Beevor, A (2012). La Segunda Guerra Mundial. Editor digital: JeSsE ePub base r1.1.
Béjar, M (). Historia del Mundo Contemporáneo (1870-2008). Editorial de la Universidad de la Plata. Buenos Aires.
Brorklund, M (1958). La gran estrategia de las grandes potencias. Revista de Política Internacional número 39, del Centro
de Estudios Políticos y Constitucionales. Madrid.
Bruun, G (1964). La Europa del Siglo XIX 1815-1914. Editor digital: Titivillus ePub base r1.2
Hobsbwam, E (1998). Historia del Siglo XX. Crítica. Buenos Aires.
Hobsbwam, E (2006). La era de las revoluciones 1789-1848. Crítica. Buenos Aires.
Hobsbwam, E (2009). La era del Imperio 1875-1914. Crítica. Buenos Aires.
Kissinger, H (1996). La Diplomacia. Ediciones B S.A. Barcelona.
Morillo, J (2017). Reseña The World Order. Revista Estudios Internacionales Universidad de Chile.
Stevenson, D (2004). 1914-1918: Historia de la Primera Guerra Mundial. Editor digital: JeSsEePub base r1.2
Stone, N (2013A). Breve historia de la Primera Guerra Mundial. Editor digital: Titivillus ePub base r1.2
Stone, N (2013B). Breve historia de la Segunda Guerra Mundial. Editor digital: Titivillus ePub base r1.2
APARATO DE NOTAS
1
Léase La Diplomacia, pp.7-11. Consultar El nuevo orden Mundial.
«
2
La “paz” debe entenderse como la ausencia de grandes conflictos entre las potencias del sistema.
«
3
Periodización propia del auge y caída del Concierto Europeo.
«
Periodo
Inicio
Fin
Nombre
1776-1815
Independencia EEUU
Congreso de Viena
Revolución burguesa e industrial
1815-1848
Congreso de Viena
Revoluciones de 1848
Los congresos europeos
1848-1871
Revoluciones de 1848
Unificación de Italia y Alemania
Se arraiga el nacionalismo emergen nuevos actores
1871-1888
Unificación de Italia y Alemania
Weltpolitik de Guillermo II
Cambio de alianzas y aflora la Weltpolitik
1888-1914
Weltpolitik de Guillermo II
I Guerra Mundial
El reparto imperialista y el apetito de las nuevas potencias
1914-1945
I Guerra Mundial
II Guerra Mundial
Segunda guerra de los treinta años (Primera y segunda
guerra mundial)
4
Segunda Guerra de los treinta años.
«
“Supuso dos grandes contiendas separadas por veinte años, aunque a medida que se alejan de nosotros parecen mezclarse como si
fueran episodios de un único conflicto, que empezó con la guerra de 1914-1918”. Historia de la Primera Guerra Mundial, Stevenson,
D (2004) P.50.
“Yo lo llamaría Segunda Guerra de los Treinta Años (1914-1945). Las causas y cómo se sale de la Primera Guerra Mundial, provocan
la Segunda”. Dr. Eduardo González Calleja, profesor de Historia Contemporánea en la Universidad Carlos III de Madrid.
Véase:
http://blogs.elpais.com/papeles-perdidos/2014/06/la-continuidad-entre-las-dos-guerras-mundiales.html
5
“En países como Rusia, Escandinavia o los Balcanes, en donde la ciudad no había florecido demasiado
del 90 al 97% de la población era campesina.” Hobsbawm, E. (2009A). La era de la revolución.
«
6
El imperio napoleónico logra subir los tributos gracias a la supresión de derechos feudales y a las confiscaciones de tierras a la
nobleza y a la iglesia. Además, beneficia la libertad de empresa, creación del banco de Francia, crea el código civil, entre otras cosas.
«
7
Coaliciones contra Napoleón Bonaparte.
«
Coalición
Participantes
Aliados de Francia
Primera
Habsburgos, Sacro Imperio Romano Germánico, Reino Unido, Reinos de España, Prusia,
Portugal, Cerdoña, Nápoles, Provincias Unidas (países Bajos)
Monarquía Española, República Bátava
Segunda
Sacro Imperio Romano Germánico, Archiducado de Austria, Ducado de Milán
Gran Ducado de Toscana, Imperio ruso, Reinos de Portugal, Nápoles, Sicilia, Orden de
Malta, Imperio otomano
Reinos de España, Dinamarca y Noruega,
Repúblicas de Bátava, Helvética, Cisalpina,
Romana, Partenopea
Tercera
Reino Unido, reinos de Austria, Suecia, Nápoles e Imperio Rusia
Reino de Baviera
Cuarta
Reinos de Prusia, Sajonia, Suecia, Sicilia, Imperio ruso, Reino Unido
Imperio español, Reinos de Baviera, Wurtemberg,
Italia, Nápoles, Etruria, Países Bajos,
Confederación Suiza
Quinta
Reino Austria y Reino Unido
Sexta
Imperio ruso, Reinos de Prusia, Portugal, Sajonia, Baviera, Wurtemberg
Suecia, Imperio austríaco, Reino Unido, España
Reino de Italia, Nápoles, Dinamarca y Noruega,
Gran Ducado de Varsovia, Suiza, Confederación
del Rin
Séptima
Reino Unido, Imperio Rusia, Reinos de Austria y Prusia
Reino de Suecia y Países Bajos
Fuente: Elaboración propia con datos obtenidos de La era de las revoluciones, Hobsbwam.
8
Mapa N°1 Imperio Napoleónico 1812.
«
9
El mapa de Europa se rehízo sin tener en cuenta las aspiraciones de los pueblos o los derechos de los numerosos príncipes
despojados en una u otra época por los franceses.” Hobsbawm, E. (2009A) P.108.
«
10
“Durante treinta y nueve años, desde 1815 hasta 1854, las grandes potencias europeas habían evitado cualquier choque armado entre
ellas mismas. Esta larga paz fue destruida por el estallido de la Guerra de Crimea, en 1854, y en los diecisiete años transcurridos desde
1854 hasta 1871 se produjeron cinco conflictos distintos, cada uno de los cuales envolvió a dos o más grandes potencias.” Bruun. G
(1964) P.54.
«
11
Sistemas Bismarckianos.
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12
“Rusia conservó Besarabia meridional, Batum, Kars y Ardahan. Austria recibió un mandato para ocupar Bosnia y Herzegovina.
Inglaterra ocupó Chipre. Grecia obtuvo Tesalia, y Bulgaria fue declarada en parte autónoma y en parte tributaria. Serbia, Rumanía y
Montenegro se declararon independientes. Los franceses (que todavía no se habían recuperado de su derrota de 1870) se contentaron
con la promesa de que se les daría Túnez y los italianos con promesas todavía más vagas respecto de Albania”. Bruun, G (1964) P. 75.
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13
El Imperio alemán, el Imperio austrohúngaro, Bélgica, Dinamarca, el Imperio otomano, España, Estados Unidos, Francia, Reino
Unido, Reino de Italia, Países Bajos, Portugal, el Imperio ruso y Suecia.
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14
La primera guerra de los Balcanes (1912-1913) fue entre Liga Balcánica (Bulgaria, Grecia, Montenegro y Serbia) con el objetivo de
expulsar al Imperio otomano de Europa. Lo logran y la paz se consigue con el Tratado de Londres.
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La segunda guerra de los Balcanes enfrenta a Bulgaria con sus antiguos aliados de la Liga Balcánica, Rumanía y el Imperio Otomano
en 1913. Ganan los aliados y logran la paz en el Tratado de Bucarest.
15
“Serbia era importante además desde el punto de vista estratégico, pues podía obligar a los Habsburgo a dividir
sus fuerzas en una guerra austro-rusa.” Stevenson, D (2004) P. 180.
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16
Sólo medio siglo antes, Bismarck había predicho con toda exactitud que Rusia jamás perdonaría a Austria que la hubiera humillado
en la guerra de Crimea. Ahora, Alemania cometía el mismo error, intensificando la desavenencia con Rusia, que había comenzado en el
Congreso de Berlín. Kissinger P. 136
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17
El sueño de Mussolini radicaba en poder unir África Oriental Italiana hasta Libia (las zonas coloreadas en verde), el problema es
que para lograrlo, debía conquistar territorios de la colonia británica.
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18
Una paz punitiva compromete el orden internacional porque impone a los vencedores, extenuados por los esfuerzos de guerra, la
tarea de mantener sometido a un país resuelto a socavar todo acuerdo. Cada país que tenga un motivo de queja está seguro de encontrar
un apoyo casi automático en el descontento bando vencido. Tal sería la maldición del Tratado de Versalles. Kissinger p 51.
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Auge_y_caida_del_Concierto_Europeo_y_su.pdf
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