FUNDAMENTOS DEL PARADIGMA DE LA COMPLEJIDAD: El paradigma de la complejidad
propuesto por Morín, se fundamenta en los siguientes principios u operadores del conocimiento:
- El principio sistémico u organizativo. Implica la unión del conocimiento de las partes con
el conocimiento del todo; su objetivo consiste en combatir la idea (reduccionista) de que el
todo es tan sólo la suma de las partes.
- El principio hologramático. Es poner de manifiesto aquello presente en toda organización
compleja: la parte está en el todo y, a su vez, el todo está en la parte. Por ejemplo: la
célula es una parte de un todo (el organismo), pero, a la vez cada célula de nuestro
organismo contiene la totalidad de la información genética de ese organismo.
- El principio recursivo. Morín lo llama proceso del remolino. Consiste en “un bucle
generador”, en el cual los efectos y los productos son, asimismo, productores y causantes
de lo que los produce. Por ejemplo: los seres humanos somos producto de un sistema de
reproducción (ancestral), y nos convertimos en productores del proceso al reproducirnos.
- El principio dialógico. Permite asumir, racionalmente, la inseparabilidad de nociones
contradictorias para concebir un mismo fenómeno complejo. Por ejemplo: cuando se
considera la especie o la sociedad, el individuo desaparece, pero cuando se considera al
individuo es la sociedad la que desaparece. Según este principio, “el pensamiento debe
asumir dialógicamente los dos términos que tienden a excluirse entre sí”.
Las partes que constituyen el todo dialogan permanentemente, no hay jerarquías, ni dominancias.
El hombre es totalmente biológico y cultural.
RELACIONES Y CONTRIBUCIONES DE LA BIOLOGÍA HUMANA A LA PSICOLOGÍA. BASES
BIOLÓGICAS DE LA CONDUCTA HUMANA: Es necesario conceptualizar en forma integral al ser
humano.
Bleger consideraba que las investigaciones que aislaban al ser humano perderían vigencia al
superar los dualismos metafísicos, como innato- adquirido, individuo-sociedad, mente-cuerpo.
1. Consideraba que era necesario conceptualizar en forma integrada al humano y que era
una aberración del pensamiento científico tomar la parte por el todo o analizar en una
categoría única al ser humano.
2. Todas las ciencias no son sino fragmentos de una sola realidad, única y total; todos los
fenómenos se relacionan entre sí y se condicionan recíprocamente.
3. Estos hechos no deben ser olvidados cuando por razones metodológicas se aísla, divide,
y estudia por separado algún grupo de fenómenos.
Para Pichon Rivière (2001), las dualidades (mente-cuerpo, salud-enfermedad) sirven para realizar
integraciones y descubrir los diferentes aspectos de la psique: definimos la conducta como
estructura, como sistema dialéctico y significativo en permanente interacción, intentando resolver
desde esta perspectiva las antinomias mente-cuerpo, individuo y sociedad, organismo-medio,
concepto en el que la individualidad importa para la comprensión de un fenómeno complejo.
En este sentido integral del humano la conducta es orgánica y psicológica y no puede dejar de ser
alguna.
De acuerdo con Bleger existen niveles de integración en donde los niveles superiores contienen a
los inferiores y agregan condiciones nuevas, en dónde el nivel psicológico y axiológico serían los
niveles más altos que integrarían elementos nuevos que no existen en el nivel biológico.
Todo lo que se manifiesta en el hombre es siempre psicológico y este nivel de integración no puede
darse jamás sin los niveles precedentes.
Refiere también que la conducta es siempre una manifestación de un ser humano en un contexto
social y tiene propiedades que no aparecen en el nivel biológico, y a pesar de que la psicología no